Este juguete va para un amigo que ha tenido un niño y quería regalarle esto para que se acordara siempre de su primer peluche. Es un caballito de trapo muy bien conseguido que es muy suave y sin riesgo de arañazos para el niño. Los "pelos" del caballo de su cabeza y cola no se desprenden fácilmente, por lo que no hay problema de que intente arrancarlos.
Es hipoalergénico y se puede lavar en lavadora y pasar por secadora, aunque en el programa delicado. Es orgánico y no hay problema en que el bebé se lo meta en la boca y juegue con el, por eso buscaba un juguete de estas características y este es el que más me gustaba en cuanto al diseño.
Se puede comprar aquí: Caballo de algodón
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